Hace ya casi 3 meses una Lamien se encuentra en huelga de hambre, huelga de hambre que no aparece en ningun medio de comunicacion masivo, que no es cubierta por el excesivo rascismo que hay en nuestra suciedad cuando se trata de cualquiera de los grupos que ellos los muy putos consideran minorias.
La Chepa se encuentra en una situacion de extrema delicadeza, talvez en sus ultimos momentos y dentro de su lucidez reivindica desde su cama y esposada, el llamado a seguir luchando, cada uno desde su rincon y con las formas que considere necesario contra esta indiferencia aplastante y este gobierno de mierda que lo unico que hace es desentenderse a travez del silencio.
Los perros andan sueltos y la concerta se saca su ultima careta y actua definitivamente como una dictadura, que oculta y maneja la informacion y por otra asesina y acusa falsos enfrentamientos como en operacion Albania , Janequeo, Colombo.
En la iglesia desde su Jerarquia callan, desde el 15 de Diciembre pasado prometieron interceder por la situacion de Patricia Troncoso y hoy a casi 3 meses aun no dan la cara ni siquiera como cristianos tratando de excusarse a traves del apoyo que dieron tras el asesinato de este nuevo weichafe Matias Catrileo, pero dividiendo el conflicto mapuche que es uno solo, con asesinatos, despojos y sobre todo con la huelga de hambre de nuestra lamien.
La prensa Oficial nada dice del padecimiento de esta mujer, mas reproducen todo un paisaje lleno de veranos y consumo al igual que en dictadura, pero que hacer si este pais ha vivido siempre como un testigo silencioso el proceso de despojo y abusos contra el pueblo mapuche.
Si hasta los que se dicen izquierda hoy andan repartiendo abrazos, de fiesta los frescos de raja, el pais se cae a pedazos, los abusos ya no pueden ser mas obvios y los weones de fiesta,
tomando cerveza,
fumando pititos,
y mañana a seguir cagaditos.

Hay que pelear hasta arrebatar a la chepa y a todos los luchadores sociales desde las carceles de esta dictablanda, desde esta dictadura civil...


La unica lucha que se pierde es la que se abandona.

Bernardino Vasquez Gonzalez